Ekologistak Martxan contra la exploración de hidrocarburos en costas vascas

Los permisos que han conseguido la concesión de Declaración de Impacto Ambiental (DIA) Fulmar y Pelicano-1 se encuentran muy cercanas a las costas vascas, en la costa de Bermeo y Elantxobe. Los permisos de exploración Mesana solicitados la semana pasada corresponde a las petroleras Shell y Capricorn. Estos se encuentran al norte, cerca de los límites marinos con el estado francés, y serían por tanto en aguas profundas en alta mar.

Como denuncia Ekologistak Martxan, estos métodos de exploración pueden tener un impacto ambiental considerable en esos lugares, con el agravante que supone el mar, el agua, pues la posibilidad de extenderse es mucho mayor. Sin embargo las instituciones están obviando dichos riesgos. El Cantábrico, pese a la inexistencia de actividad extractiva, ha sido castigado en numerosas ocasiones por derrames de buques, siendo el más cercano el del Prestige (2002)1. Ekologistak Martxan se opone a que se repitan situaciones similares y critica que el gobierno haya concedido dichos permisos.

Últimamente el gobierno ha aprobado permisos para sondeos las Islas Canarias ante los cuales Ekologistak Martxan también se ha posicionado públicamente con concentraciones. Pero allá, al contrario de lo que ocurre aquí, las instituciones se han mostrado contrarias a las prospecciones, y han convocado una consulta sobre el tema para las que Ekologistak Martxan también desea los mejores resultados , demostrando nuevamente la clara voluntad de ese pueblo.

Las prospecciones que se plantean hoy en día son cada vez más desesperadas y con más riesgo.

A nivel más general Ekologistak Martxan se opone a esta nueva ofensiva petrolera y gasista en la que ha entrado el gobierno español y que corresponde a los movimientos de las grandes transnacionales por hacerse con lo último y más complicado de hidrocarburos. A esta ofensiva corresponden las extracciones en alta mar a grandes profundidades y con grandes riesgos como se demostró en el desastre de BP en el Golfo de México (2010). Pero no es la única agresión.

También corresponden a esta época de disminución petrolera otras prácticas extractivas de gran impacto ambiental que denuncia Ekologistak Martxan como la extracción de crudo pesado en el medio de la selva, de arenas bituminosas (a cuyos grandes impactos de extracción se debe sumar los de su refino y que ahora sufrimos en Euskal Herria, en la planta de Petronor (Repsol) de Muskiz, así como el gran proyecto para convertir nuestro país en un campo de extracción por fractura hidráulica (88% de Araba, 73% de Bizkaia, 40% de Gipuzkoa y 13,5% de Nafarroa) con todos los impactos que eso conlleva.

Intentos desesperados por prolongar un modelo energético de dependencia petrolera

Estos son tan sólo, intentos desesperados de extraer lo poco que queda o lo inextraible a cuenta del medio ambiente, de la vida y de nuestras vidas. Porque cuanto menos queda, más factible (económicamente) es el implantar estos carísimos métodos. Pero cuanto más se ahonda esta “crisis” que nos golpea, estas propuestas no hacen más que aumentar la deuda de nuestras instituciones.

Por otro lado está claro que la adición a hidrocarburos de nuestro sistema va a ser muy difícil de superar, pero hay que buscar alternativas reales y prepararnos para ella en lugar de ahondar aún más esa dependencia. Euskal Herria es totalmente dependiente en materia energética pero en los últimos años sólo se han potenciado proyectos basados en hidrocarburos sin impulsar políticas reales por las renovables, o impulsando proyectos de gran consumo energético (TAV, autopistas, etc). Y los proyectos que se plantean ahora tampoco van a contribuir a superar esa dependencia.

Crisis actuales como las del cambio climático obligan también a tomar otras direcciones. A puertas del COP20 de Lima (diciembre de 2014), es patente que no se está cumpliendo con los planteamientos de Kioto (ya de por sí muy mínimos) – y aquí en Euskal Herria todavía menos, y con estas propuestas menos.

Transnacionales e instituciones unidas

De la misma forma, Ekologistak Martxan también denuncia a las compañías que solicitan estos permisos de exploración de hidrocarburos, especialmente Shell, quien cuenta con un bagaje siniestro de daños ambientales y sociales en Nigeria, Ecuador, Burma, Irlanda, Sudáfrica, Canadá, etc, o ahora con el fracking en Argentina, Australia, Sudáfrica, Kurdistán, etc, o queriendo explotar en el Artico. Por ello Ekologistak Martxan dice a esas compañías que no se las quiere aquí, y que no son de fiar.

Finalmente, Ekologistak Martxan denuncia también que el gobierno español es responsable también de esa ofensiva petrolera contra el medio ambiente. En este caso los ministerios de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente por aprobar esos permisos. Pero también el Gobierno Vasco que impulsa esta ofensiva petrolera y es el principal impulsor de las otras concesiones para fracking. Aún así a Ekologistak Martxan exige de nuevo la anulación de esos permisos y que el Gobierno Vasco cambie de postura y exprese su rechazo, para poder superar así la dependencia petrolera e iniciar la transición precisa.

Bilbo, 15 de octubre de 2014