Ekologistak Martxan duda de la seguridad de la celda del monte Argalario de Barakaldo con residuos contaminantes del químico cancerígeno lindane. La afirmación se produce tras conocerse que informes del propio Gobierno Vasco han detectado que este depósito supuestamente hermético registra la entrada de agua de lluvia.
Ekologistak Martxan señala al respecto la desidia e inacción por parte de las autoridades ya que las advertencias por escrito se producen desde hace al menos cuatro años. Desde el colectivo se advierte de que ni siquiera se está haciendo un mantenimiento de manera adecuada y también ha destacado que en su momento ya se señaló que esta instalación tenía todas las garantías.
Sin embargo el aislamiento está en duda en estos momentos y además no se están adoptando medidas para una celda que supuestamente era provisional y debía tener una vida útil de entre 25 y 30 años hasta encontrar una solución tecnológica para eliminar definitivamente el contaminante.
Ekologistak Martxan ha destacado que esta situación no es la única. Hasta la fecha sigue sin haberse recuperado el también vertedero ilegal de lindane en Modorreta, en El Regato, entre otros puntos en Bizkaia y en el resto de España en donde el químico cancerígeno puede tener contacto directo con la población y causar riesgos tanto para la salud pública como para el medio ambiente.
También en relación con Barakaldo, aunque en estos momentos no se utiliza, sigue sin declararse la prohibición de captación de agua para consumo humano en el pantano de Oiola, que durante años dio de beber a vecinos de Barakaldo, Alonsotegi y Sestao, incluso cuando ya se había detectado la presencia de lindane.
Ante esta situación, Ekologistak Martxan y la confederación Ecologistas en Acción mantienen una campaña que busca una solución integral. El lindane tiene su origen en el pasado pero no es un problema superado, pues supone un riesgo y efectos graves para salud pública y el medio ambiente hoy. Ha pasado tiempo más que suficiente para adoptar medidas de remediación y no se han adoptado.
La situación ha motivado acciones informativas y de sensibilización por parte de Ekologistak Martxan, además de acciones legales y ante todos los niveles instituciones, desde los Ayuntamientos hasta la Unión Europea. Aunque las denuncias en tribunales han sido en algunos casos archivadas y, en consecuencia, cerradas, hay algunas demandas que siguen adelante en Álava (Zadorra), Santurtzi (Etxe Uli), Valencia o un vertido en Soria de contaminantes producidos en Barakaldo.
Ekologistak Martxan además interpreta que hay un delito continuado porque los efectos persisten y no se limita el hecho punible al momento del vertido ilegal. La asociación señala así mismo que los residuos siguen y que sus riesgos y las restricciones legales se vienen desarrollando desde hace más de 30 años, y se preguntan quién es el responsable hoy de ese riesgo para la salud pública que la presencia de lindane sigue suponiendo.
Desde Ekologistak Martxan se reclama un más que necesario tratamiento transversal y global donde participen todas las administraciones, y además han denunciado públicamente la inacción, desidia y negligencia de las instituciones públicas, a las que exigen acabar inmediatamente con la contaminación por este producto cancerígeno.
