• Un Real Decreto necesario y urgente: Ekologistak Martxan y GADEN destacan la importancia de actualizar la normativa para la protección de aves y solicitan que se incluyan a los murciélagos.

• Propuestas concretas: Se exige que se incluyan a los murciélagos, la creación de zonas de exclusión para infraestructuras energéticas y un canon a empresas energéticas para medidas correctivas.

• Llamado a la responsabilidad: Las evaluaciones de impacto ambiental deficientes deben llevar a sanciones y responsabilidades claras para las empresas promotoras.

Ekologistak Martxan y GADEN han presentado un conjunto de propuestas en el marco de la consulta pública convocada para la elaboración de un Real Decreto orientado a la protección de la avifauna contra la colisión y electrocución en líneas eléctricas de alta tensión, así como para la reducción de la mortalidad en aerogeneradores. Las dos organizaciones consideran que este Real Decreto es no solo necesario, sino también urgente, dada la creciente expansión de las infraestructuras energéticas y su impacto sobre la biodiversidad. Ekologistak Martxan y GADEN insisten en que el nuevo Real Decreto debe incluir específicamente a los murciélagos en su ámbito de protección, dada su alta vulnerabilidad ante estas infraestructuras.

1. Delimitación de zonas de exclusión: la medida preventiva más eficaz.

La principal propuesta de Ekologistak Martxan y GADEN es la creación de zonas de exclusión para la instalación de infraestructuras energéticas, evitando así las áreas más sensibles para aves y murciélagos. «Es crucial establecer mapas de exclusión que incluyan corredores de vuelo y que se identifiquen estas zonas en todas las Comunidades Autónomas (CCAA) del Estado, utilizando criterios científicos y estudios de campo actualizados. Estos mapas deben ser de uso obligatorio en las evaluaciones de impacto ambiental, garantizando que se eviten los puntos críticos para la biodiversidad», afirman las organizaciones.

2. Canon a las empresas energéticas para financiar medidas correctivas

Además, Ekologistak Martxan y GADEN proponen la implementación de un canon a las empresas energéticas, destinado a financiar medidas correctivas en las líneas de evacuación de sus proyectos. «Este canon debería reinvertirse en acciones como la reubicación de líneas peligrosas, la instalación de dispositivos disuasorios y el desarrollo de tecnologías avanzadas para mitigar los impactos negativos,» añaden las personas portavoces de las organizaciones.

3. Responsabilidad y seguimiento riguroso

En las aportaciones se exige que se establezcan responsabilidades claras para las empresas promotoras cuyas evaluaciones de impacto ambiental resulten deficientes. Si un proyecto causa impactos significativos sobre especies amenazadas que no fueron adecuadamente evaluados, las empresas deben asumir las consecuencias, incluyendo la posible retirada de aerogeneradores peligrosos o el desmantelamiento de infraestructuras.

4. Seguimiento de la mortalidad en las infraestructuras

GADEN y Ekologistak Martxan también insisten en la necesidad de realizar estudios de seguimiento de mortalidad de fauna en las infraestructuras energéticas durante todo el período de explotación. Estos estudios deben ser rigurosos y utilizar metodologías estandarizadas propuestas por el Ministerio, abarcando tanto la mortalidad directa como los efectos sobre la nidificación y éxito reproductor de las especies más sensibles en un radio de 10 km alrededor de las infraestructuras.

5. Una oportunidad histórica para la biodiversidad

«El nuevo Real Decreto es una oportunidad histórica para mejorar la protección de la biodiversidad en el Estado,» subrayan GADEN y Ekologistak Martxan. Las organizaciones consideran que la actualización de la normativa es crucial para hacer frente a la problemática actual de la electrocución y colisión en tendidos eléctricos y aerogeneradores. Es imperativo que la nueva norma incorpore prescripciones claras y adaptadas a los desafíos actuales, con el objetivo de proteger eficazmente a las especies más vulnerables.

Conclusión

GADEN y Ekologistak Martxan hacen un llamado a las administraciones y a las empresas energéticas para que adopten estas medidas con el fin de garantizar la sostenibilidad de las infraestructuras energéticas en armonía con la conservación de la biodiversidad. Ambas organizaciones se comprometen a seguir trabajando en la defensa del medio ambiente y en la promoción de políticas energéticas sostenibles y justas.